Fausto Cabrera : Constructor de sueños. -- Catalino Parra : El último de los gaiteros. -- Manuel H. Rodríguez : Pionero de la memoria.

Los tres tienen más de 80 años y no obstante continúan activos. Los tres siguen derrochando talento, pasión y ganas. Los tres, para decirlo con una metáfora contradictoria, son un ejemplo extraordinario de joven senectud.

Fausto Cabrera llegó a Colombia desde su España natal siendo un niño, y enseguida comenzó a recitales de poesía en el Teatro Colón y en las primeras emisoras de radio que se establecieron en el país. Muy pronto pasó al teatro, y durante sus años de actividad ha fundado innumerables grupos con lo cual ha contribuido a formar generaciones completas de colombianos en el exigente arte de la actuación. A los 9 años Catalino Parra, "el último de los gaiteros", como lo denomina Mariano Candela, construye su primer instrumento musical. Ya a los 15 estaba tocando y cantando en agrupaciones musicales, llevando el folclor de su región a toda Colombia y el exterior. Muy pronto también comenzó a enseñar el arte de la tambora y las técnicas de pesca que aprendió de su abuelo y que nunca dejó Por más que recorriera mundo. De Manuel H. Rodríguez podemos decir que siempre estuvo ahí, retratando los acontecimientos más importantes de la historia de Colombia. ¡Quién no ha visto su retrato de Manolete? ¿Sus fotografías del tranvía Ardiendo en la Avenida Jiménez durante el Bogotazo? Sos panorámicas que documentaron el crecimiento de la capital durante las décadas del sesenta y setenta? Su estudio de la calle 22 siempre ha estado abierto para quien quiera visitarlo, y su arrojo para estar en el lugar indicado en el momento preciso es toda una lección para los reporteros gráficos del país.

El Jurado de esta segunda entrega del Premio Vida y Obra del Ministerio de Cultura de Colombia -conformado por el director de la biblioteca Luis Ángel Arango, Jorge Orlando Melo, y por el escritor y guionista Jorge Franco- decidieron reconocerles a estos constructores de historia, a estos Pioneros, a estos incansables trabajadores de la cultura del país esos más de 60 años de labores. En esta publicación los colombianos podrán conocer más de su vida, así como detalles desconocidos de su formación, a manera de ejemplo de cómo se construye día a día, paso a paso, la identidad de un país.